
Washington, D.C. (EFE).- El 46% de los estadounidenses considera que la reforma sanitaria del presidente Barack Obama será dañina para la economía, frente al 37% que la considera positiva, según revela una encuesta de Gallup.
El sondeo, realizado entre los días 2 y 3 de julio, poco después de que la Corte Suprema avalara la constitucionalidad de la reforma sanitaria aprobada por el Congreso en 2010, muestra que un 37% considera que la reforma será buena económicamente, mientras que un 18% no opinó o consideró que su efecto será nulo.
Las opiniones están más divididas dependiendo de la tendencia política de la muestra de 1,061 sondeados, ya que entre los demócratas la proporción de los que consideran que la reforma sanitaria contribuirá a la mejora económica aumentó hasta el 62%.
Mientras tanto, entre los republicanos, que se han opuesto a la totalidad de la reforma, los que la consideran positiva económicamente son solo el 13%, un porcentaje que se reparte más entre los votantes independientes, con un 34% que cree que ayudará y un 47% que cree que será negativa.
La encuesta, con un margen de error de medio punto porcentual, es significativa en este año electoral en el que la reforma sanitaria ocupa un papel central, ya que intenta ampliar el número de personas con cobertura de salud con la obligación a partir de 2014 de que se contrate un seguro privado.
El sector de la salud representa entre un sexto y un quinto de la economía estadounidense, y los demócratas esperan que esta reforma sanitaria abarate los precios de los seguros, al incorporar personas fuera del sistema de salud e introducir orden en el mismo.
Los republicanos, por su parte, consideran que la reforma ampliará el déficit presupuestario, servirá como una excusa para subir impuestos y disuadirá a los empresarios a contratar, ya que los negocios con más de 50 empleados deberán obligatoriamente dar seguro médico a sus trabajadores.