
Washington, D.C. (EFE).- La Oficina de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) dejó entrever que sus agentes podrán continuar, en ciertos casos, las deportaciones de inmigrantes indocumentados incluso por menores infracciones de tráfico, al modificar el polémico programa Comunidades Seguras.
En un informe de 20 páginas, ICE respondió a las recomendaciones que hiciera un grupo de trabajo especial creado para modificar Comunidades Seguras, un programa federal que busca agilizar la deportación de indocumentados con antecedentes penales.
Entre las recomendaciones del Grupo de Trabajo sobre Comunidades Seguras está una que pedía a ICE suprimir cualquier acción policial que se base únicamente en menores infracciones de tráfico, y que además sopesara otras alternativas por otras infracciones menores.
ICE consideró que, en efecto, sería un uso deficiente de recursos el tomar acciones policiales solo por pequeñas infracciones de tráfico.
No obstante, en lo que se refiere a indocumentados que no han sido condenados por otros delitos y que tampoco figuren entre los casos prioritarios para la deportación, ICE “sopesará su detención cuando este reciba la condena por una menor infracción de tráfico criminal”, dijo la agencia.
La categoría de ofensas menores de tráfico excluye, según ICE, el conducir bajo la influencia de sustancias tóxicas, accidentes automovilísticos en los que el responsable se da a la fuga o causa lesiones a una persona, u otras violaciones que puedan causar serios daños al público.
“Es importante clarificar que en el caso de individuos condenados por menores infracciones de tráfico criminales, ICE continuará considerando si es oportuna o no la discreción en casos individuales” a la hora de detener y deportar a los indocumentados.
Según ICE, infracciones menores como conducir sin la debida licencia “no merecen el mismo nivel de atención que otros”.
Para el legislador demócrata Luis Gutiérrez, el informe de ICE parece indicar que, efectivamente, las condenas por infracciones menores podrían dar pie a que la policía local detenga a un indocumentado y lo entregue a la custodia de los agentes federales.
“ICE y el Departamento de Seguridad Nacional están dando marcha atrás a su postura de hace apenas un año, de que deberíamos usar nuestros recursos para las deportaciones y encarcelamientos para los peores criminales, en vez de llenar nuestras cárceles y centros de detenciones migratorias con gente que debería ser nuestra prioridad más baja para la deportación”, dijo Gutiérrez en un comunicado.
La lectura del presidente del Comité Judicial de la Cámara Baja, el republicano Lamar Smith, sin embargo, fue diametralmente opuesta a la de Gutiérrez, al señalar que los cambios anunciados por ICE solo “debilitan” el programa de Comunidades Seguras.
“El programa no recaba información de raza o etnia, solo revisa el estatus migratorio de cada persona detenida, encarcelada y a la que se le toman las huellas”, explicó Smith, cuyas críticas también encontraron eco en el grupo Federation for American Immigration Reform (FAIR), que pide la expulsión de todos los indocumentados.
El programa Comunidades Seguras permite que los agentes de ICE revisen las huellas digitales de criminales y las cotejen con una base de datos para identificar y expulsar a los indocumentados.
El objetivo del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) es ampliarlo a todo el territorio estadounidense para 2013, pese a que ha sido criticado por amplios sectores del país.
En paralelo al informe de ICE, el sheriff del condado de Maricopa en Arizona, Joe Arpaio, dijo al programa “DirectoUSA” de CNN en Español que sus agentes continuarán las redadas con o sin la ley SB1070, ahora que la Corte Suprema de EE.UU. estudia su constitucionalidad.
Arpaio también manifestó su oposición a legalizar las drogas, tal como plantean varios gobiernos de América Latina, y señaló que más bien “deberían hacer más para frenar el tráfico de drogas y dejar de traer las drogas a Estados Unidos”.