La reciente intoxicación que sufrió un estudiante universitario de Massachusetts, quien después de comer sobras de arroz y pollo de un restaurante, tuvo que ingresar a un hospital donde le amputaron ambas piernas y todos los dedos ha puesto sobre la mesa el grave riesgo de ingerir alimentos que no han sido bien almacenados.
El estudiante, de 19 años, estaba en perfectas condiciones de salud. Pero, horas después de consumir el pollo, pasta y arroz que le habían sobrado, experimentó un fuerte dolor abdominal y su piel se tornó púrpura.
De acuerdo con la publicación The New England Journal of Medicine, la condición del joven empeoró rápidamente. Sufrió respiración anormal, presión arterial alta y vómitos.
Los médicos le diagnosticaron enfermedad púrpura fulminante, lo que le provocó rigidez en el cuello, colapso respiratorio e insuficiencia orgánica. Para salvarle la vida fue necesario que le amputaran sus dos piernas y todos los dedos de las manos.
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), la reacción que sufrió el adolescente se debe a que algunos alimentos secos, como el arroz y la pasta, tienen una bacteria llamada Bacillus cereus que se multiplica cuando los alimentos se dejan a temperatura ambiente demasiado tiempo.
El doctor Sam Crowe, epidemiólogo de los CDC explicó que el “arroz frito es uno de los vehículos alimentarios más comunes de esa bacteria” debido a la forma en que se prepara.
Si en una casa o en un restaurante se prepara una gran cantidad de arroz y luego se deja enfriar por varias horas, las bacterias (que parecen esporas) pueden germinar. El arroz contaminado enfriado luego se fríe en una sartén con otros ingredientes, por lo general a una temperatura que no es lo suficientemente alta como para destruir la toxina.
Una vez que se comen, las esporas germinadas o la toxina pueden causar vómitos o diarrea.
La clave para prevenir estas enfermedades es evitar que las bacterias se multipliquen después de cocinar los alimentos. Para enfriar rápidamente el arroz sobrante, se recomienda almacenarlo en recipientes pequeños y poco profundos.
Crowe indica que, si se consumen grandes cantidades de la toxina, ésta provocará vómitos de 30 minutos a seis horas después del consumo. Si las esporas se consumen y germinan en los intestinos, provocarán diarrea hasta 16 horas después de la ingestión.
Tanto los vómitos como las enfermedades diarreicas duran aproximadamente 24 horas.
La mejor forma de tratar una intoxicación alimentaria es el descanso y la rehidratación. Si alguien se deshidrata y no puede reponer los líquidos lo suficientemente rápido, debe buscar atención médica.
Los vómitos también pueden causar insuficiencia hepática, según Crowe.
El arroz corre el riesgo de contaminarse durante el proceso de enfriamiento. Los CDC recomiendan que, después de hervir el arroz, se mantenga muy caliente o se enfríe rápidamente. La “zona de peligro” para el crecimiento de bacterias se encuentra en temperaturas entre 40 y 140 grados Fahrenheit.
Cómo recalentar o comer arroz sobrante de manera segura:
- Fría y coma el arroz o refrigere el arroz sobrante dentro de las dos horas posteriores a su preparación.
- No ponga una gran olla de arroz en el refrigerador. Cuando se almacena correctamente el arroz sobrante, la clave no es el material sino el tamaño.
- Divida grandes cantidades de alimentos en recipientes poco profundos para que se enfríen rápidamente y eviten el crecimiento de bacterias.
- No deje el arroz hervido afuera durante la noche.
- Busque atención médica si los síntomas de las enfermedades transmitidas por los alimentos persisten durante más de 24 horas.
- Se puede comer el arroz sobrante durante varios días después de haberlo cocinado. Solo asegúrese de que se almacenó correctamente y no se mantuvo a temperatura ambiente durante mucho tiempo.
- También es importante recalentar el arroz correctamente a fuego alto. Recalentar mal el arroz puede estimular las esporas y hacer que germinen.