Moore: lastre para los republicanos

 

María Luisa Arredondo.
María Luisa Arredondo.

María Luisa Arredondo*

Las acusaciones datan de hace alrededor de 40 años y no existen testigos presenciales. Sin embargo, los testimonios de las cinco mujeres que acusan de acoso y asalto sexual a Roy Moore, candidato republicano al Senado en Alabama, son tan convincentes que han desencadenado una severa crisis en el partido de Trump.

De todas las acusaciones, la más comprometedora para el candidato republicano, quien hasta ahora ha negado de manera vehemente las denuncias, es la de Beverly Young Nelson, quien reveló que Moore la atacó sexualmente cuando ella tenía 16 años. De acuerdo con su relato, en esa época ella trabajaba como mesera en un restaurante del que Moore era cliente asiduo y, en una ocasión, quiso forzarla a tener relaciones sexuales con él en un auto. Como ella se negó, terminó con moretones en el cuello.

Roy Moore.
Roy Moore.

A través de un vocero, Moore desmintió el alegato y aseguró que ni siquiera conocía a la mujer.

Pero Nelson mostró a la prensa una prueba contundente de su testimonio: una “amorosa” dedicatoria de Moore en su libro de preparatoria de 1977.

Por otra parte, el hecho de que las acusaciones de las mujeres, que tenían entre 14 y 18 años cuando fueron víctimas de Moore, sean tan similares muestra que Moore tenía un patrón de conducta perturbador al mostrar interés en jovencitas menores de edad, cuando él era un hombre de más de 30 años. Cabe destacar que, irónicamente, Moore es juez y representa los valores religiosos más conservadores del partido.

Los alegatos no podían haber surgido en peor momento para los republicanos. A raíz de las acusaciones de acoso contra el productor de cine Harvey Weinstein ha crecido de manera exponencial el movimiento contra el abuso sexual, lo que ha llevado a la caída de celebridades como el actor Kevin Spacey y el comediante Louis C. K.

Hasta ahora, los republicanos están divididos en torno al asunto. Muchos coinciden en darle el beneficio de la duda a Moore, pero un número creciente, entre ellos los líderes Mitch McConnell y Cory Gardner, le han pedido a que se retire de la contienda e incluso han amenazado con expulsarlo, si llega a ganar.

Trump, quien tiene pendientes varias demandas de acoso sexual, ha manifestado que Moore debería renunciar solamente si son ciertos los alegatos. Pero es un hecho que el mandatario no tiene la menor credibilidad en este tema y los republicanos que se nieguen a distanciarse de Moore tampoco la tendrán.

Así las cosas, lo más inteligente que pueden hacer es retirarle el apoyo a Moore, aun cuando pierdan el escaño en Alabama y se debilite su fuerza en el Senado.

*María Luisa Arredondo es fundadora y directora ejecutiva de Latinocalifornia.com

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