
Washington, D.C. (EFE).- La Cámara de Representantes aprobó una medida republicana que prorroga un año los préstamos universitarios Stafford con una tasa de interés del 3.4%, atizando, en pleno año electoral, otro enfrentamiento con los demócratas y la Casa Blanca.
Con 215 votos a favor y 195 en contra, la Cámara Baja, bajo control republicano, aprobó la medida y la envió al Senado, donde afronta un panorama hostil ya que los demócratas que controlan esa cámara preparan un versión muy distinta.
Previo a la votación, los republicanos derrotaron en un voto de procedimiento otra medida, 178-231, que prácticamente hubiese eliminado la iniciativa republicana.
En Estados Unidos, unos 7.4 millones de estudiantes universitarios de medianos y bajos ingresos, entre ellos 986,494 hispanos, dependen de los préstamos Stafford, subsidiados por el gobierno federal.
Si el Congreso no aprueba una prórroga, las tasas de interés en esos préstamos se duplicarán del 3.4% -donde se ubican desde 2007- al 6.8% a partir del próximo 1 de julio.
Eso significa que los universitarios acumularían una deuda adicional de mil dólares cada año en concepto del aumento en los intereses.
El voto se produjo en unos momentos en que la educación universitaria como vía para la superación personal y el desarrollo económico de Estados Unidos -y la continua tendencia al alza en las matrículas- se ha politizado.
En 2010, los graduados de las universidades en EE.UU. debían un promedio de más de 25,000 dólares en préstamos.
Ambos partidos ofrecen visiones distintas sobre cómo agilizar la recuperación económica y cortejan activamente a los jóvenes, de cara a los comicios generales del próximo 6 de noviembre.
La Oficina de Gestión y Presupuestos de la Casa Blanca (OMB) había dicho más temprano que la Administración Obama se opone a la medida republicana porque elimina el Fondo de Prevención y Salud Pública, de 17,000 millones de dólares creado bajo la reforma sanitaria de 2010.
“Esta es una propuesta con motivaciones políticas y no una respuesta seria que merece el problema”, afirmó la OMB, que aseguró que recomendará que el presidente Barack Obama la vete.
La líder de la minoría demócrata en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, votó en contra y ha acusado a los republicanos de atacar los programas de salud que benefician principalmente a las mujeres.
Durante el debate, su colega demócrata de California, Lois Capps, advirtió que las mujeres estarán atentas al voto y que lo correcto sería respaldar, no eliminar, los programas que las mantienen saludables.
Pero el presidente de la Cámara Baja, el republicano John Boehner, replicó que los demócratas están armando una guerra ficticia y “una pelea política, donde absolutamente no hay ninguna” y que, en todo caso, miles de graduados universitarios están desempleados o subempleados por culpa de las política económicas de Obama.
“Acusarnos de que queremos eliminar fondos absolutamente no es cierto”, subrayó Boehner.
La prórroga le costará al gobierno federal unos 6,000 millones de dólares, según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO). De ahí que ambos partidos disputen las formas de financiarla.
En el Senado, la minoría republicana se opone a la medida demócrata porque esta elevaría los impuestos a la nómina de ciertos empresarios con altos ingresos.
Entre el martes y el miércoles pasados, Obama realizó una gira por tres recintos universitarios en Carolina del Sur, Colorado y Iowa -estados clave para su reelección-, y eso presionó a Boehner a programar el voto de hoy.
La Casa Blanca también recurrió a la red social de Twitter para movilizar a los jóvenes a favor de congelar los intereses en los préstamos Stafford.
Grupos como la influyente Asociación Nacional de Educación (NEA) exigen la prórroga al señalar que, por primera vez en la historia, la deuda estudiantil ha superado el monto de la deuda en las tarjetas de crédito en EE.UU., sobrepasando el billón de dólares.
“Una forma de ayudar a que los jóvenes se conviertan en los líderes del mañana es asegurar que la educación universitaria no sea solo un privilegio para unos pocos sino que esté disponible para todos los que la quieran”, ha dicho el presidente de la NEA, Dennis Van Roekel.